Madrugada del lunes 29 de octubre del año 2007
Una noche tranquila con una pequeña lluvia, donde la cama llamaba para dormir y una agradable temperatura tomaba el liderazgo.
“Rafael” se levanta a las 2 de la madrugada y de repente ve todo su hogar rodeado de agua, se da cuenta que las lluvias han tomado fuerzas y que todo estaba por hundirse, todos los vecinos llaman a Rafael diciéndole que también en sus casas la corriente del rio habían subido, lo que no pasaba hace años, Rafael como único hombre en la casa sale corriendo avisarle a su mujer para sacar los electrodomésticos, luego él sujeta la televisión, una licuadora y las saca a la calle para poder recuperar algo, venciendo las fuertes corrientes, el río traía de las zonas altas más y más fuerza.
“Rafael” un hombre trabajador, muy humilde no pudo sacar a su hijo de la casa, ya era muy tarde cuando terminó de sacar los electrodomésticos, su hijo fue arrastrado por las fuertes corrientes del río desbordado y le quito la vida.
A veces nos dejamos sujetar de las cosas materiales haciéndonos olvidar de nuestra propia vida.
Republica dominicana
Tormenta Noel, 29 de octubre del año 2007.
Contado por vecinos en las orillas del río Camú, fotografía dramatizada por José Ángel.
Este historia son cosas que uno aveces mejor se queda en silencio
ResponderEliminarNo se si me equivoco hermano Timoteo, pero como es posible que el caballero pensó primero en los electrodomésticos antes que su hijo? No soy quién para juzgar, pero eso fué muy mal hecho de su parte.
ResponderEliminarPOR MAS POBRE QUE SEA SIEMPRE HAY POSIBILIDADES DE ENCONTRAR LO MATERIAL, SIEMPRE!!! Pero la vida no vuelve.
Excusame Timoteo!!! Pero según las prioridades de Rafael,,,solo mostró miseria.
saludos
zabeton, comprendo claramente lo que dices y eso es lo que más me da pena. Que hoy en día pasen esas cosas por lo material, no sé si creerle a los que me contaron la historia, pero si sé que ese día le dio un gran golpe a esa familia… y así pasan muchos casos, da pena y vergüenza, que eso pasara de esa manera.
ResponderEliminarMás que triste me sentí cuando me contaban esa historia, más larga que no la quise relatar porque no podía poner tantas cosas tristes cuales ellos me contaban.
Penoso pero cierto
En situaciones límites siempre socorremos la vida, lo material es materia muerta.
ResponderEliminarEspero que no haya pasado.
Un beso
Ha pasado. Muy triste y aleccionador.
ResponderEliminarmuy buena entrada.
ResponderEliminarUn abrazo
Lamentablemente es la combinacion de miseria material con miseria espiritual, recordemos que cuando se anuncia la llegada de un fuerte huracan, muchas veces "el hombre" de la casa se niega a abandonarla, temiendo que los amigos de lo ajeno se adueñaran de sus pocos tesoros si abandona la vivienda. Eso aumenta el numero de victimas cada vez que recibimos la "visita" de esos huracanes. Yo se que esta fuerte pensar primero en cosas materiales, pero quien sabe como estan las coordenadas de prioridades en el cerebro del que toda su vida solo ha conocido una miseria espantosa, que no se puede describir, solo la entiende el que ha caminado por los lugares que "sobreviven" esos desafortunados. El mundo del gato es muy diferente al mundo del raton.
ResponderEliminarQue triste, pero así los hay, que se les va el avión.
ResponderEliminarChance y esto es muy drástico pero semeja mil cosas mas
Saludos
Estoy de acuerdo con juan... Uno no es quien para juzgar a nadie por una situación asi pues hay que entender lo que es vivir en la miseria para entender eso... Pero aunque se viva en la miseria tenemos que hacer reaccionar a aquellos que no pueden de que la vida solo es una y que no puede recuperarse como las cosas materiales.
ResponderEliminarmuy triste, ese dia fue tragico para el país entero.
ResponderEliminarQue historia tan triste Timoteo;
ResponderEliminarLastima por el padre y tristeza por la muerte del hijo.
Enmedio del caos abrumador,es humano pensar en lo material y más personas que viven en la miseria.
El hombre debio pensar que su hijo se salvaria solo...pobre hombre.
Un abrazo!!!
Asi mismo, muy triste pero muy cierto. Esto es para reflexionar y valorar que lo importante es lo que no se compra con el dinero; la vida. Me imagino como debe de estar la conciencia de ese señor, yo tengo un hijo y de solo pensar eso que hizo ese hombre me parte el alma de imaginar su hijo siendo arrastrado por el agua en medio de la oscuriadad, mientras que el padre se preocupaba por lo material.
ResponderEliminarHola Timoteo. Ayer lei el comentario que dejaste en mi blog. Yo no he estado publicando entradas en mi blog últimamente. Aun peor, todo ese tiempo lo dejé solo. Por otra parte, yo estoy pendiente de las niñas; pero últimamente no se ha publicado alguna acción a favor de ellas. Gracias mi hermano espiritual.
ResponderEliminartimo como siempre algo positivo en tu blog.
ResponderEliminarConchale timoth vas mejorando, ya escribes cosas con sentido comun
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